El peral es uno de los árboles frutales más adecuados para aprender a hacer injertos. Injertar un peral es un proceso que requiere práctica pero, a la larga, es sencillo y fácil de comprender.
Para saber cuándo y cómo injertar un peral, en este post te voy a contar cuáles son las mejores épocas para hacer y las técnicas más adecuadas para realizar un injerto de peral exitoso. ¡Empezamos!
¿En qué época injertar un peral? ¿Qué técnica utilizar para injertar un peral?
La mejor técnica para injertar un peral es el injerto de púa, por lo que la época más adecuada para realizar este injerto es cuando el peral está saliendo de su reposo invernal, es decir, a finales de invierno y principios de primavera, siempre antes de que aparezcan las flores o las hojas.
Ten en cuenta que esto también depende del clima de tu zona. Por ejemplo, en el hemisferio norte esto suele ocurrir a principios de marzo, aunque depende de lo cálido o frío que sea el clima local del lugar donde trabajes.
Otra técnica muy buena para realizar un injerto de peral es el injerto de yema. Este tipo de injerto se puede realizar en dos épocas del año:
En primavera, a ojo velando. Si escoges este momento, la yema brotará después de que agarre el injerto.
A mediados o finales de verano, a ojo durmiendo. Si optas por esta época, la yema no brotará hasta la primavera siguiente.
Si decides realizar los injertos en primavera, independientemente de la técnica que utilices es recomendable que hayas cortado las púas al menos un mes antes y que se hayan mantenido en un ambiente húmedo y fresco hasta el momento de realizar el injerto. Esto puedes hacerlo en un frigorífico o envolviéndolas en papel film.
¿Qué portainjertos escoger para injertar un peral?
Un peral se puede injertar sobre otro peral de cualquier variedad o nacido de semilla, sobre membrillero, espino albar, acerolo, níspero, níspero japonés y serbal.
Lo mejor es injertar un peral sobre membrillo, ya que esto te permitirá obtener perales más manejables. Otra buena opción es injertarlo sobre peral borde, es decir, de semilla, que te dará un árbol más longevo y vigoroso.
¿Cómo injertar un peral?
Para explicarte cómo injertar un peral, vamos a utilizar el injerto de púa de la variedad limonera. Te lo explicaremos con un injerto de hendidura simple, para lo cual tendrás que seguir estos pasos:
1.- Con unas tijeras de podar afiladas y desinfectadas con alcohol, corta horizontalmente el patrón en una zona libre de nudos y a unos 80 centímetros del suelo.
2.- Con una navaja también afilada y desinfectada con alcohol, haz una hendidura de unos 2 centímetros de profundidad perpendicular al corte.
3.- Haz una cuña de unos 2 centímetros de largo en la parte más gruesa de la púa.
4.- Pon un destornillador en la hendidura, sin dañar el patrón, para facilitar la colocación y mantener la hendidura abierta.
5.- Coloca la varilla en la hendidura. Procura que el cámbium de las cortezas del patrón y la púa coincidan en ambos lados del corte y saca el destornillador con cuidado.
6.- De abajo para arriba, coloca alrededor cinta aislante para fijarlo y cubrir el corte vertical sin cubrir el horizontal.
7.- Cubre el corte horizontal con mástic cicatrizante para protegerlo del sol, la lluvia y posibles enfermedades y plagas.
Aquí tienes el paso a paso en vídeo, para que puedas ver cómo se hace el injerto de púa simple en un peral:
Como ves, injertar un peral es un proceso sencillo, aunque necesita práctica y tiempo para perfeccionar la técnica. Pero lo único que necesitas es tener los materiales adecuados, prestar atención y conseguir experiencia y práctica con el paso del tiempo.
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