Una de las razones más importantes para podar un kiwi es incentivar la producción del fruto. Pero no es la única, ya que otros de los objetivos de la poda son facilitar la recolección, dirigir el crecimiento y la formación del árbol, mejorar la aireación y favorecer la penetración de la luz solar.
Los kiwis jóvenes se podan en etapas tempranas para definir su forma. La forma es muy importante ya que tiene consecuencias en la cantidad y calidad de la producción, la facilidad de recolección y otras actividades. Los kiwis más viejos se podan para conservar su forma y para despejar la parte interior del frutal, esto hace que penetren la luz solar y tenga una mejor aireación. Todas estas actividades promueven la producción del fruto en posteriores cosechas. La frecuencia de poda de los kiwis maduros varía entre una vez al año y una vez cada dos años.
Hay muchas maneras de podar un kiwi, y realizar una buena poda, dependerá fundamentalmente de las artes del podador. Sin embargo, sí existen algunos criterios generales que debemos de seguir para podar kiwis. Para realizarla correctamente, te contaré todo lo que debes saber sobre la poda de kiwis. ¡Comenzamos!
Si algo hay que debemos tener en cuenta al planificar la poda de kiwis, es si después hay riesgo de heladas. El kiwi, al igual que los demás árboles frutales, puede sufrir daños si se produce una helada después de podarlo. Por todo ello, siempre que haya riesgo de bajas temperaturas (cercanas a 0º) habrá que posponer la poda hasta que el riesgo sea mínimo.
Debido a esto, deberemos planificar la poda para hacerla coincidir con el periodo de menor actividad y crecimiento del árbol.
Por lo general, la mejor época para podar los kiwis es justo al principio de la primavera, antes de que el árbol despierte del todo y siempre que no haya riesgo de heladas. Esto permitirá una menor perdida de sabia, y al estar cerca la etapa de desarrollo las heridas empezarán a cicatrizar pronto. En caso de climas con inviernos no muy intensos, la poda en otoño puede ser una buena opción.
Si bien las podas importantes como pueden ser las de formación, producción o renovación deben realizarse en temporadas frías, no pasa lo mismo con la poda verde. Una buena época para la poda en verde de un kiwi es a principios o mediamos del verano, es decir las estaciones más cálidas.
2.- Herramientas para podar kiwis
Para podar kiwis vas a necesitar una serie de herramientas, dependiendo de las dimensiones del árbol y el tipo de poda. Esta es una lista de algunas de las herramientas que debemos utilizar para podar kiwis:
Tijeras de podar. Hay de varios tipos:
- Tijeras de podar de una mano: con la que podremos cortar ramas de hasta 2,5 cm de diámetro. Estas tijeras son más recomendables para podas en verde.
- Tijeras de dos manos: con las que podremos cortar ramas de hasta 5 cm de diámetro.
Motosierra. Se usan para cortar troncos gruesos de más de 20 cm. Existen motosierras eléctricas que funciona con batería o con cable de alimentación, y motosierras de gasolina. Estas últimas son más potentes.
Podadora de altura. Se llaman así a las tijeras, sierras o motosierras con mangos telescópicos que permiten llegar a las ramas más altas. Con estas herramientas podemos cortar ramas a una altura de unos 5 o 6 m.
Escalera. Es importante cumplir las normas de seguridad y no colocarse en lo alto de la escalera haciendo equilibrio. Recuerda que debes colocarte unos escalones más abajo y que la cintura no debe sobrepasar el último escalón. Las caídas en altura son peligrosas en este tipo de tareas.
Elementos de seguridad como guantes, gafas, equipación, botas,... No olvides protegerte y trabajar de forma segura.
Es recomendable desinfectar las herramientas de corte antes de la poda. Esto ayudará a prevenir enfermedades en los frutales.
3.- Cómo podar kiwis
Para planificar la poda del kiwi lo primero que tenemos que saber es la edad del árbol, para así realizar el tipo de poda que corresponde a cada fase: crecimiento, fructificación y producción. No es lo mismo realizar una poda para un kiwi joven, que está creciendo y requiere una poda de formación, que podar uno adulto, en el que tendremos que dirigir la poda más a la producción y a facilitar la recogida del fruto.
3.1. - Cómo podar un kiwi joven
¿Cuando se considera que un kiwi es joven? La respuesta es relativa, ya que dependiendo de la zona, el clima, la variedad,... los árboles pueden tardar más en madurar. Pero por lo general, y por dar un cifra, podríamos decir que un kiwi pasa de joven a adulto entre los 6 y los 10 años.
Las podas en este periodo de formación deberán estar orientadas a determinar la estructura principal sobre la que crecerá el árbol. Vamos a ver los tipos de poda que debemos realizar en la etapa de desarrollo:
3.1.1 - Poda de formación del kiwi
Con la poda de formación lo que se persigue es dirigir la formación y crecimiento del kiwi cuando todavía es joven. Se realiza cuando el árbol está en reposo y no se preven heladas después de la poda.
La haremos de la siguiente forma:
Primer año: recortaremos todas las ramas del árbol. De esta manera, incentivaremos el brote de ramas más bajas.
Segundo año: quitaremos las ramas que broten desde la mitad inferior del tronco y se recortarán un poco las ramas principales, a 2/3 de su longitud.
Tercer año: podamos las ramas principales a 2/3 de longitud, y quitamos las ramas que crezcan hacia dentro de la copa del árbol. A continuación almorzaremos :)
3.1.2 - Poda de fructificación del kiwi
Este tipo de poda se lleva a cabo para definir las ramas principales productivas.
Para ello, elegiremos las 3 o 4 ramas principales sobre las que queremos que crezca el resto del árbol. Estas ramas no deben tener una inclinación demasiado elevada, ya que así evitaremos que se venzan por el peso de la cosecha.
Seguidamente, podaremos los chupones que broten de estas ramas y los recortaremos un poco, definiendo así la estructura del árbol.
3.2. - Cómo podar un kiwi adulto
La poda de un kiwi adulto se hace para mantener su forma y limpiar la parte interior del árbol para así facilitar la entrada de luz y la aireación. Se denominan podas de producción. También podemos hacer durante esta fase podas de rejuvenecimiento y podas en verde. A continuación vamos a ver cómo se realizan estos tipos de poda:
3.2.1 - Poda de producción del kiwi
La poda de poducción se realiza con el objetivo de aprovechar al máximo la luz solar y favorecer la aireación del interior del árbol. De esta forma se pretende obtener una cosecha abundante y de mejor calidad.
Se trata de una poda de aclareo de las ramas y de limpieza, con el objetivo de aprovechar la entrada de luz y beneficiar la producción. Se buscan copas lobuladas, con entrantes y salientes, ya que así aumentamos la exposición y aprovechamos mejor la luz. Además, cortaremos también las ramas poco productivas para que broten otras nuevas.
Por tanto, lo que conseguimos con este tipo de poda es mejorar el rendimiento del kiwi y conseguir un fruto de mayor calidad.
La poda de producción la haremos de la siguiente manera:
En primer lugar eliminaremos los chupones más grandes, ya que son poco productivos y frenan el correcto desarrollo de la rama.
No debemos eliminar todos los chupones, sino que se deben dejar los más débiles situados en el interior del árbol para sombrear las maderas que conforman la estructura del kiwi.
Podaremos las ramas más bajas, ya que son las que reciben menos iluminación y, por lo tanto, producen los frutos de peor calidad.
Debemos conseguir que la copa tenga muchos entrantes y salientes, o lo que es lo mismo, es mejor formar una copa lobulada a una copa esférica, ya que así conseguiremos un mayor aprovechamiento de la luz y la superficie externa de fructificación será mayor. Podaremos también las ramas que crezcan hacia dentro de la copa, despejando el interior del árbol para permitir la entrada de luz.
No debemos cortar todas las ramas finas, para mantener la relación hoja/madera. Así evitaremos el exceso de madera, que reduce la capacidad de renovación de las ramas productivas.
Vamos a repasar los tipos de poda vistos hasta ahora con esta infografía:
3.2.2 - Poda de rejuvenecimiento del kiwi
La poda de rejuvenecimiento se realiza en árboles con indicios de envejecimiento, después de haber estado produciendo muchos años, entre 20 y 40 años. Los síntomas de envejecimiento pueden ser:
Hojas más pequeñas y de color amarillento
Baja producción
Pérdida de follaje en el interior del árbol
Se trata de una poda drástica, para rejuvenecer el kiwi, aunque también se puede hacer de forma progresiva.
Poda drástica de rejuvenecimiento: En el primer caso lo que hacemos es eliminar todo el follaje del árbol, dejando prácticamente la base del tronco y las ramas principales para que vuelvan a crecer.
Poda progresiva de rejuvenecimiento: Consiste en ir podando desde lo alto de la copa hasta la base de las ramas. Se hace por fases, cada 3 años iremos cortando una de las cuatro ramas principales del ábrol.
3.2.3 - Poda en verde del kiwi
En verano se pueden realizar podas de renovación o podas en verde.
Aunque se pueden realizar en cualquier época del año, lo normal es hacerlas a finales del mes de agosto, cuando el kiwi apenas tiene actividad a causa de las elevadas temperaturas.
Se hace para controlar el crecimiento de los chupones o retallines, eliminando los que no son aprovechables para el kiwi.
4.- Vídeo - La poda del kiwi
Y como más se aprende es viéndolo, vamos a ver un vídeo de cómo realizar la poda del kiwi ¡Dale al Play!
5.- ¿Qué hacer con los restos de la poda?
Una vez terminada la poda no ha acabado todo el trabajo, nos falta deshacernos de los restos de ramas. Pero ¿qué hacemos con ellos?... Bien, tenemos varias opciones:
Utilizar una trituradora de ramas. Este tipo de máquina nos facilita mucho la vida y además es lo ideal para enriquecer el terreno de materia orgánica, ya que el material triturado podemos extenderlo por el terrno. Hoy en día existen en el mercado trituradoras de ramas de uso doméstico al alcance de cualquier bolsillo.
En esta guía de compra te mostramos las mejores biotrituradoras de madera de uso doméstico, sus características, ventajas y desventajas, para que sepas qué máquina se ajusta más a tus necesidades.
Quemar las ramas. Para ello tenemos que pedir un permiso en el ayuntamiento que corresponda. Hay días en los que no está permitido hacer fuego, por lo que debemos informarnos previamente y pedir los correspondientes permisos.
Hacer leña para estufas, hornos, chimeneas,... Para ello hay que preparar los restos de ramas y troncos, cortarlos en tacos y hacer trozos más pequeños, deshaciéndonos de las hojas, las cuales esparciremos por el cultivo. También se puede vender esta madera, por ejemplo a negocios que requieran un horno de leña, como panaderías, pizzerías,...
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