El aguacate es la fruta de moda. Su origen se encuentra en la zona de Mesoamérica, pero su textura y su sabor lo han popularizado rápidamente alrededor del mundo. Eso sí, debes saber que el árbol del aguacate tiene un crecimiento lento y necesita un clima tropical.
Y te preguntarás: ¿de dónde sacamos tantos aguacates si su árbol tarda entre diez y quince años en dar sus frutos? ¡Pues de los injertos! Al injertar un aguacate se estimula su crecimiento y fructificación, obteniendo su fruto en apenas dos años. Si quieres hacerlo tú mismo, te contamos cómo injertar aguacate y qué época es la más adecuada.
¿Qué es un injerto de aguacate?
Como sabes, injertar consiste en unir dos plantas diferentes para obtener un beneficio. Por lo general, dicho beneficio es una mayor producción de sus frutos, una fructificación más rápida, un árbol de varios frutos o una mejor adaptación al terreno, entre otros.
El injerto es la porción de la planta de la que se quieren obtener los frutos; por su parte, la segunda planta ya asentada es el portainjertos o patrón. A la hora de realizar injertos, sólo se pueden injertar plantas de la misma familia y debe hacerse correctamente para que no mueran.
Un injerto de aguacate te proporciona esta fruta en un periodo de dos años, más o menos. Un tiempo muchísimo menor que su habitual fructificación de diez a quince años. Para hacerlo, necesitas un árbol nativo o que ya esté adaptado al terreno y el clima de tu zona y los injertos del aguacate.
¿Cómo injertar aguacate?
Primero de todo, debes saber que los tipos de injerto más adecuados para injertar aguacate son los de enchapado, los de púa y los de yema. En este caso, utilizaremos un injerto de yema en T.
Antes de empezar, ten en cuenta que es recomendable que la planta de aguacate tenga un centímetro de grosor aproximadamente. Al regar, nunca mojes los injertos.
También debes hacerte con una navaja o tijeras para injertar, cinta para injertar y una bolsa plástica transparente. Desinfecta bien la herramienta de corte que vayas utilizar dejándola la noche anterior sumergida en alcohol etílico.
Ahora, para realizar un injerto de aguacate, sigue estos pasos:
1.- Retira la yema de su tallo original junto con el material suficiente como para incluir una fina capa de la corteza interior. Esto servirá para realizar el esqueje.
2.- Haz un corte en forma de T en la superficie del patrón, preferiblemente en una rama o tallo sin yemas. El corte debe ser lo suficientemente profundo como para dejar expuesta la capa verde de la corteza interior.
3.- Donde los dos segmentos de la T se unen, utiliza los dedos o la herramienta de corte para desprender la corteza superficial y dejar visible la capa verde del interior.
4.- Introduce el esqueje entre los pliegues de la corteza levantada, en el centro del corte con forma de T. Asegúrate de que tanto el injerto como el patrón están limpios.
5.- Cubre el corte con la propia corteza del patrón y rodea la zona del injerto con la cinta para que el esqueje se mantenga en su sitio. Ten cuidado de no cubrir la yema ni apretarla demasiado.
¡Y listo! Cuando hayan pasado entre seis y ocho semanas, quita la cinta para comprobar cómo ha crecido el injerto. Si lo haces en primavera, con un mes será suficiente. La yema debería tener un aspecto saludable; si parece demasiado seca, es posible que el injerto haya fallado.
Ten en cuenta que los primeros días tras el injerto la planta estará sensible, por lo que es recomendable que el esqueje no reciba demasiada luz solar directa o durante muchas horas. Pasado el tiempo, para cuidar el injerto sólo tendrás que llevar a cabo los cuidados habituales del árbol del patrón y del propio injerto.
¿Cuál es la mejor época para injertar aguacate?
La mejor época para hacer un injerto de aguacate es la primavera, porque así el injerto puede crecer durante el verano. Sin embargo, es posible injertar aguacates tanto con púas como con espiga durante dos épocas del año dependiendo de si se realiza con yema viva o con yema muerta:
Si es con yema viva, la mejor época es la de los primeros días de junio, para que continúen creciendo hasta agosto y septiembre.
Por el contrario, si es con yema muerta, la época propicia será durante agosto y septiembre, para que el injerto se detenga en invierno y empiece a crecer durante la siguiente primavera.
La temperatura adecuada para realizar un injerto de aguacate es entre los 15ºC y los 30ºC.
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